Retrato de Lalo Gattás
Azahel Jaramillo H.
Empezó ya la cuenta regresiva. En cosa de tres semanas, Eduardo Abraham Gattás Báez se convertirá en presidente municipal de la capital de Tamaulipas.
Su experiencia en el palacio del 17 Hidalgo es que ya fue Regidor. Estudió Leyes en la Universidad Autónoma de Tamaulipas y además de su incursión en la política priista se ha dedicado a negocios que tienen que ver con la publicidad comercial.
Casado con Lucía Rodríguez, técnica en Química, es padre de Abraham, Jacobo y Galilea, de 13, 12, y 7 años de edad. Acaba de cumplir 54 años el 23 de julio. Es pues Leo. Si nos atenemos a lo que dicen Marion D. March y Joan Mc Evers, en su libro Astrología, los Leo tienen como caracteres positivos: idealista, orgulloso, ambicioso, creativo, digno, romántico, generoso, seguro de sí mismo y optimista. ¿Negativos? Preocupado por la posición social, arrogante, infantil, cruel, pretensioso y autocrático. (La autocracia, define el diccionario, “es el sistema de gobierno la voluntad de un hombre es la suprema ley”. Esperemos no sea el caso.)
Lo cierto es que Lalo Gattás sabe de derrotas y de triunfos (al igual que Andrés Manuel López Obrador, si bien en otros escenarios).
Cercanos a Gattás son el abogado Hugo Reséndez Silva (hijo del ex alcalde Tito ), anunciado ya como Secretario del Ayuntamiento, así como el licenciado Ubaldo Castillo Martínez, que lo mismo puede ser el Director de Comunicación, que Gerente de Comapa, en donde ya opera él la transición.
La historia nos dice que el domingo 5 de junio del 2016 hubo elecciones en Tamaulipas. Se compitió por la gubernatura, las 43 alcaldías y también por las dos diputaciones locales, de los distritos XIV y XV. Los candidatos a legisladores del partido tricolor fueron Carlos Morris Torre y Lalo Gattas Báez.
El PRI perdió la gubernatura con Baltazar Hinojosa Ochoa. Y ganó -el PRI- la alcaldía de Victoria en la persona de Oscar Almaraz Smer. Ganó el candidato a diputado Carlos Morris, y perdió el candidato Lalo Gattas. Tras el resultado adverso para Gattás publiqué justo el 11 de julio de ese año en este “Expediente”: En vísperas de la votación, el sábado 4 de junio, jerarcas del PRI, tuvieron una reunión con todos los líderes seccionales del PRI en una palapa ubicada por la Carretera Interejidal. Y clarito dieron la orden que debían transmitir a la militancia.
“Van a votar -fue la instrucción- por Baltazar para Gobernador, por Oscar Almaraz para Alcalde, por el distrito XIV por Carlos Morris, y por el distrito XV por Orlando Guillén. del partido Movimiento Ciudadano, MC. ¿Les quedó claro?”.
A los seccionales ante la orden de votar por Orlando Guillén, de MC, en perjuicio de priista Lalo Gattas, se mostraron sorprendidos. Entonces una mujer levantó la mano y dijo… “¿A ver por quién dijo que debemos votar los del 15 distrito?”. “Por Orlando Guillén, ¡de Movimiento Ciudadano!”, fue la respuesta.
Publicada la información, nadie desmintió ni confirmó lo escrito. Ni el presidente del partido, Rafael González Benavides, ni los voceros del PRI, ni Orlando, ni Gattas. En el shock de la derrota de Baltazar, y del ascenso de Francisco García Cabeza de Vaca, entendí que aquello era un asunto menor. Y ahí lo dejé.
Cuatro años después de ello, (en junio de 2020) al ver que los resultados de la encuestadora “Massive Caller” daban fuerte prospecto de MORENA a Lalo Gattas a la Presidencia Municipal de Victoria, marqué al celular de Gattas.
Y me dijo: “Perdí por mil 600 votos. Eso fue parte de mi salida del PRI”
-¿Qué sentiste al enterarte de esa reunión en la Interejidal?
“Me enteré de esa reunión. Te vomitas. Yo llevaba años militando en el PRI, apoyando a ganar a chorros de candidatos, y cuando te dan oportunidad de ser candidato, te traicionan en la mesa estos canijos. Te vomitas”.
Y añadió Lalo Gattas: “En noviembre llevé una carta de renuncia al PRI estatal y al Comité Ejecutivo Nacional. Hago pública mi renuncia. Y en esos días, en un viaje a la Ciudad de México me presentan con el ahora Presidente Andrés Manuel López Obrador, líder entonces el partido MORENA y me cautivó por su forma de ser. Sencillo, buena vibra”.
Vale decir que Lalo Gattas estudió la licenciatura en Derecho en la Universidad Autónoma de Tamaulipas. “Terminé, pero no me he titulado”, me dijo en junio del año pasado. NOS VEMOS.
Azahel Jaramillo Hernandez