Rentó Xico una blindada a «misteriosa empresa»
Daisy Verónica Herrera Medrano
Reportera
El Gobierno de Victoria, a cargo de Xicoténcatl González Uresti firmó contrato por 160 mil pesos mensuales para la renta de una camioneta blindada, con una «misteriosa empresa” de la Ciudad de Reynosa.
«La misteriosa empresa» ostenta dos direcciones fiscales, una de ellas corresponde a un local comerciales ocupado por una imprenta y la segunda dirección a un complejo de oficinas en el que se rehusaron a dar información sobre la empresa de alquiler de automóviles.
De acuerdo al padrón de proveedores del Ayuntamiento de Victoria, la empresa que responsable de la camioneta blindada, fue dada de alta como una Sociedad Anónima de Capital Variable, con una dirección fiscal que no coincide con la dirección del registro fiscal ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
La empresa que brindó en renta la blindada, de acuerdo a la publicación del Periodico Oficial del 31 de enero de 2020, es la número 487 de la lista del padrón de provedores, en donde manifiesta tener su dirección fiscal en Bulevard del Maestro, 213 en la Colonia del Maestro, en la ciudad de Reynosa.
Sin embargo, al intentar localizar la empresa en esa dirección, lo único que se pudo localizar es una imprenta semiabandonada cuyo dueño dijo “tener años” en el lugar y desconocer la empresa en mención que tiene contratos con el gobierno de Xicoténcatl González.
Esta misma empresa fue identificada en el SAT con una dirección fiscal distinta, Calle Emiliano Zapata #319 colonia Morelos también en Reynosa.
En ambas direcciones aparece con el registro fiscal SIS1505118D8 y con la misma denominación o razón social.
En el padrón de proveedores aparece Virginia Nadia Grajeda Castro como representante legal y en el registro ante el SAT aparece un correo electrónico pero como una Sociedad Anónima de Capital Variable.
Ésta no es la primera ocasión que una investigación periodística deriva en el hallazgo de inconsistencias entre el padrón de proveedores y el registro federal de constituyentes.
En el pasado, este medio ha evidenciado incluso, contratos millonarios por adjudicaciones directas a empresas que no son localizadas en la dirección fiscal que ostentan.
A la fecha ni la Contraloría Municipal, la Dirección de Administración o la Tesorería han acallado los rumores de «empresas fantasmas» ni han revelado información que permita conocer el porque la discrepancia de datos en direcciones fiscales y supuestas sanciones a las empresas que invitaron a los contratos de proveeduría.
