HUMO BLANCO

SE SALEN DEL HUACAL

Por Clemente Castro González


Entre los personajes alineados al Partido Acción Nacional (PAN) y que operan en ese sentido, anote al ex alcaldes de Madero, GUADALUPE GONZÁLEZ GALVÁN y JAIME TURRUBIATES SOLÍS.

El primero es un priista de viejo cuño, mientras que el segundo, en su momento, no dudó en echarse en brazos del tricolor y hasta hace poco tiempo se le veía muy cercano a dicho partido por cuyo apoyo llegó a la alcaldía.

Lo cierto es que el caso de los mencionados se reproduce por la geografía estatal e incluso organizaciones que, se supone, son parte del Revolucionario Institucional (PRI), se pintaron de azul o al menos su cúpula así lo hace.

Por ejemplo, tal sesgo se da en la Confederación de Trabajadores de México (CTM) en Madero.

Ahí, en esa ciudad petrolera, los guías de obreros cetemistas hacen lo posible por marcar terreno de sus compañeros priistas y, por supuesto, del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) que, podría inferirse, son su respaldo natural.

Pero en política así sucede y los dirigentes y sus agrupaciones pueden pasarse de una causa a otra, según convenga a sus intereses.

A propósito, si bien GUADALUPE y JAIME traen su operación a favor de los albicelestes otros aliados de coyuntura de este instituto, caso de los cetemistas en Madero, no se mezclan con los ex ediles.

Tan es así que los corrieron del desfile del Primero de Mayo y no precisamente por aspectos de principios o ideología.

Pero lo que son las cosas, se comenta que, mientras notables militantes del PRI apoyan al PAN, el ex munícipe panista de Madero, ANDRÉS ZORRILLA MORENO, le estaría echando la mano a la candidata priista por el 20 Distrito, MAYRA OJEDA CHÁVEZ.

Lo que motiva a ZORRILLA a darle la espalda a su partido se explica porque su organismo lo dejó a la buena de Dios cuando perdió la alcaldía y por tanto, le cerró la posibilidad de ser aspirante a legislador.

A ello habría que sumarle que ANDRÉS esta pelado con el ex perredista y diputado panista que compite para seguir en el Congreso, el legislador JOAQUÍN HERNÁNDEZ CORREA, alias “La Quinita”.

Sin salirnos del señalado distrito, la que se encuentra en la competencia y puede alcanzar la meta es la candidata de MORENA por el Distrito 20, BERTHA ELENA SÁNCHEZ HERNÁNDEZ.

Eso a condición de que el munícipe, ADRÍAN OCEGUERA KERNION y su grupo, le den “calorcito” en sus horas no laborables.

Y es que si bien la dama trae su trayectoria, enfrente tiene las estructuras de institutos a los cuales no les queda de otra que ganar.

Un enredo más, con cargo y costo al PRI, se da en el distrito 19, Altamira Miramar, cuya candidata es BERTHA VÁZQUEZ ALONSO.

Porque no hay duda de que la aspirante es competitiva pero su partido, a nivel municipal, la abandonó.

Así se nota entre las agrupaciones afiliadas a la CTM y el propio dirigente local priista, HÉCTOR ARELLANO CASTILLO.

Lo que detectaron los jerarcas del tricolor en oficinas centrales es que su compañero, cuando lo requieren para acciones partidistas, se les esconde.

Priva la versión de que ARELLANO CASTILLO fue “sensibilizado” por autoridades de la presidencia municipal, de corte panista.

A propósito de candidatos, los del tricolor de Matamoros, IRMA CASTILLO SEGOVIANO (10), GUADALUPE REYES PÉREZ (11) y HÉCTOR SILVA SANTOS (12), le dijeron a la lideresa nacional priista, CLAUDIA RUÍZ MASSIEU, en su reciente estancia en esa ciudad fronteriza, que urgía que los apoyaran con recursos para poder ganar.

Parece que los abanderados del PRI no entendieron lo que, en los comicios pasados les expresó su anterior presidente, RENÉ JUAREZ CISNEROS, al advertirles a los candidatos a legisladores federales y prospectos a las alcaldías que “tenían que rascarse con sus propias uñas”.

Aquel mensaje aplica debido a que el dinero no lo sueltan tan fácilmente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) y lo que les dan de prerrogativas es insuficiente.

En efecto, los priistas se quedaron mal acostumbrados a que, desde los órdenes de gobierno, cuando estaban en el poder, el billete bajaba a manos llenas hasta para que los candidatos y su cuadro chico invirtieran una parte y la otra se fuera a su cartera.

AL CIERRE

Los militantes y dirigentes del Partido de la Revolución Democrática (PRD), celebraron su aniversario número 30 este domingo cinco de mayo.

En realidad no tienen mucho que celebrar en tanto que van a la baja debido a los desencuentros internos, la salida de afiliados y líderes, las malas decisiones políticas y la existencia de corrientes hegemónicas, harto cuestionadas.

De ser el referente de lucha de la izquierda en las tres décadas de vida partidista se convirtió en un remedo de organización, que carece de registro local en un tercio de las entidades del país, incluida Tamaulipas.

Sus números podrían evidenciar que están mejor que otros partidos pero es evidente que su caída es estrepitosa.

En la actualidad únicamente puede presumir un gobernador, el de MICHOACÁN, el cual llegó al cargo con el aval del entonces presidente, ENRIQUE PEÑA NIETO.

Lo que se registra es que en el país el PRD gobierna en 263 alcaldías y mantiene presencia en congresos locales con 62 diputados. Por cierto, cero en la legislatura tamaulipeca.

En lo federal el registro da cuenta de 11 diputados y cinco senadores, según los documentan periódicos nacionales, verbigracia, La Jornada.