AGENDA PÚBLICA
Va Morena por el “nepotismo”
Por Salvador Leal Luna
Para esta elección en Tamaulipas, este dizque partido de Morena, está cocinando elevar el “nepotismo”, no solo en cargos públicos, sino que se extenderá a los puesto de elección constitucional, como es el caso de la regidora de Tampico, Mónica Villarreal Anaya, hermana nada más y nada menos que del gobernador de cuarta, Américo Villarreal Anaya.
Antes, se había mencionado al hijo de este ejecutivo, el tal, Américo Villarreal Santiago para un cargo de elección popular, ya que como miembro del consejo de Morena dicen que lleva premio, lo que indica que el nepotismo está floreciendo en Tamaulipas, como avispas al panal.
Aquí se verá, si le hacen caso al “bravucón presidencial” de López Obrador, quien le negó a su hermana ser candidata a un cargo de elección popular, así como a otros de sus familias, por lo que también los actuales diputados locales de Morena, Úrsula Salazar Mojica y José Braña Mojica quienes son “sobrinos” de este predicador de México, pueden quedarse fuera de sus aspiraciones a las presidencia de Tampico y Victoria.
Creo que el nepotismo de familias y demás, se debe de erradicar al menos en Tamaulipas, porque no es posible que llegan a cargos familiares directos, dejando en la antesala a quienes han trabajado desde abajo y que se consideran morenistas y no esos neoliberales y conservadores, tal y como los “tacha” este sujeto de marras de López Obrador en sus mañaneras.
Hay que destacar que este nepotismo, se ve en este gobierno de cuarta, debido a que al menos en dos secretarías prioritarias están fungiendo como titulares, familiares directos de ejecutivo estatal como es el caso de Dámaso Anaya Alvarado, titular de Desarrollo Rural y Pedro Cepeda Anaya, actual titular de la Secretaría de Obras Públicas.
Dicen que existen otros más, pero en diferentes cargos, e inclusive matrimonios, pero que no son de la familia real, como es el caso en la Secretaría General de Gobierno, donde manda “El calabazo”, me refiero a Tania Contreras y su marido.
De confirmarse este nepotismo de familias por los cargos políticos, para esta elección constitucional en Tamaulipas, sin duda será un grave retroceso, debido a que se observa sólo su interés personal y político de “familias” en el poder, dejando que otros no participen libremente por esos cargos, tanto públicos como políticos.
Aquí haré un ejemplo, miren ustedes. Qué pasaría si en Tampico, fuese por tómbola o encuestas se registren, Úrsula Patricia Salazar Mojica, sobrina del “predicador de México”, Andrés Manuel López Obrador y Mónica Villarreal Anaya, hermana del ejecutivo de cuarta en Tamaulipas, Américo Villarreal Anaya.
Ambas mujeres quieren porque desde sus trincheras, una como diputada y presidenta de la Junta de Gobierno del Congreso, ha comenzado a realizar giras por las colonias y la otra actual regidora de cuarta en ese puerto, donde acaba de realizar su segundo informe y con la presencia de su hermano, donde dicen las malas lenguas que ya le dio el espaldarazo o mejor el visto bueno.
Creo que el poder legislativo de Tamaulipas, debe de comenzar a trabajar en una iniciativa para regular “el nepotismo” en el Estado, además quede consagrado en la Constitución Política de Tamaulipas, porque no es posible que se otorguen cargos públicos a familias, como mañana o pasado estén jugando por un escaño municipal, estatal o federal, familias que ostentan en el poder.
Por lo tanto y a como se ve Morena, en estas elecciones constitucionales del 2024 va por el “nepotismo”. Por eso “urge” una reforma legislativa y con alturas de miras, para evitar estas acciones negativas.
Por hoy es todo.
HASTA LA PRÓXIMA.
Correo Electrónico.
