El águila de Américo
Juan Antonio Montoya Báez
Para muchos podría ser una exageración, pero tiene un gran significado su caída, lo decimos por la imagen que circuló desde el mismo sábado cuando un grupo de trabajadores derrumbaron las letras insignias del logo del anterior gobierno.
Los victorenses difundieron ampliamente la fotografía donde tiraban el emblema de la anterior administración como era el logo “Tam” en letras azules.
Era el Tamaulipas incompleto, el Estado mocho, que representaba mucho más de lo que veíamos a simple vista.
La palabra “Tam” representaba los moches que daban los constructores, los recortes inmorales que permitían pisotear la dignidad de los trabajadores que debían aceptar las condiciones laborales que les imponían ante la amenaza del despido.
“Tam” eran las tres letras que mejor representaban a un estado mutilado que nunca pudo crecer, hasta con las acciones buenas que parecía que ejecutaban, donde siempre existía un doble fondo, como las estaciones de seguridad construidas en terrenos que representaron un sólido negocio para el presente y el futuro azul.
“Tam” eran las letras incompletas de una entidad que perdió seis años, que avanzó en materia de seguridad, pero que retrocedió en todos los demás aspectos, desapareciendo la alegría y confianza ciudadana.
Lo invitamos a recordar cómo era ese logo, su color azul, el mismo que indica en su auto o camioneta hacía que lado se encuentra el lado frío. Así más o menos fue esta administración gélida.
El gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA arribó el lunes a Palacio de Gobierno, sintió la calidez de los trabajadores, no recordamos ningún recibimiento de esta naturaleza para un mandatario.
Los empleados de la administración se desbordaron en aplausos y vivas al mandatario que emerge de la 4T y que se propone encabezar un gobierno honesto y transparente.
El nuevo emblema de esta administración muchos podrán decir que es parecido al que utiliza la línea de autobuses Senda, pero nosotros queremos ver esa “T” con el águila, como un gobierno que se renueva.
El águila real es el ave que mejor representa una renovación total, de acuerdo su naturaleza, esta ave es la más longeva al vivir cerca de 70 años, pero a los 40 tiene que tomar una difícil y muy dura decisión.
A las cuatro decadas, el ave tiene las uñas de sus garras débiles, pico curvado con sus alas viejas y pesadas, por lo que el águila debe pasar por un duro y doloroso complicado proceso de renovación, cuyo primer paso es refugiarse en lo más alto de la montaña durante 140 días.
El primer paso es golpear la roca con su pico hasta arrancárselo, después esperar que nazca nuevamente y así poder extirpar sus uñas. Con las garras nuevas, procede remover con su pico todas las plumas.
Todo ese proceso dura cinco meses, donde el águila estrena un pico mejor diseñado y fuerte, garras nuevas con un plumaje joven y fuerte, que le permiten vivir otros 30 años, convirtiéndose en el ave más longeva del planeta.
El águila real vence sus miedos e inseguridades, asumiendo una actitud valiente y de confianza, pues durante esos cinco meses no puede cazar, pero deben ser fuertes para aceptar el reto de renovarse o morir.
Este no es el caso, AMÉRICO recibe un gobierno endeudado y con muchos problemas, pero también sumamente fortalecido capaz de soportar los embates de los gobiernos más rapaces.
La nueva administración no debe olvidar el pasado, castigar el saqueo y renovar su administración, devolviéndole la grandeza a Tamaulipas.
Bueno, por hoy es todo.
Adiós y aguas con los patinazos…
Contacto: