EL PATINADERO
El último chisguete
Por Juan Antonio Montoya Báez
Alguna vez, un sheriff texano habló de manera entusiasta acerca de unos de sus ciudadanos que era postulado como candidato a gobernador en Tamaulipas.
El Sheriff pedía dar una oportunidad a los vientos de cambio, no sabemos que tanto influyó el policía texano, lo cierto es que el ganador de la elección estatal fue su recomendado.
No fue el único gringo que lo defendió con pasión de aquella campaña en contra del impulsor azul del cambio, otros también pedían no escuchar la campaña que hacía el equipo del candidato del PRI, BALTAZAR HINOJOSA OCHOA.
Los audios del rancho, los pecados juveniles y otros que le achacaban cometió desde alcaldía y Comapa de Reynosa no fueran aceptados. Las pruebas eran palpables, pero el desgaste del PRI era superior.
En las últimas horas, se ejecuta una campaña en contra del gobernador electo de Tamaulipas, AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, tratan relacionarlo con la delincuencia organizada para echar abajo su triunfo y presionar el dictamen que todavía se encuentra en los tribunales electorales.
Son las vísperas de que la Sala Superior del Tribunal Electoral termine de una vez por todas con las esperanzas azules. El triunfo de AMÉRICO es inminente, pero el PAN parece no entenderlo por lo que inicio una nueva cruzada.
La temática es la misma del pasado, acusar que la delincuencia incidió en el resultado, para lo cual se utiliza portales y la prensa afín para que hagan publicaciones que ataquen al tamaulipeco.
Con la guerra mediática, pretenden influir entre los magistrados en una decisión que ya tomaron, donde desecharon todos los argumentos, falsos testimoniales, inventos de los promoventes y otras bajezas para anular la elección.
La sucia maniobra fue echada abajo, cuando el principal argumento que presentaron fue unos supuestos documentos secretos de autoridades estadounidenses donde advierten que la campaña de Morena era financiada por grupos delincuenciales.
En la información, comunicaban de una reunión del senador JOSÉ NARRO CÉSPEDES con un colaborador del narco y un grupo de personas. Tomaron una foto circunstancial con su compañero AMÉRICO.
Sin embargo, ahora la defensa o aclaración del gobierno de Estados Unidos, no proviene de un sheriff, se trata de la justificación de su más alto representante en México que desmiente tengan algún señalamiento contra el gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA.
Fue el propio embajador de Estados Unidos, KEN SALAZAR, quien dejo perfectamente en claro que no existe un documento alguno en contra de AMÉRICO.
Se trata de una falsificación de documentos oficiales norteamericanos, por lo que quienes orquestaron la campaña deberán de responder por que este es un delito.
Fue una campaña de lodo, que nació de mentes perversas, sin fotografías, sin audios pidiendo dinero, solamente supuestos y documentos falsos.
Bien dicen que quien nada debe, nada teme, por lo que el propio AMÉRICO envió una carta aclaratoria a un medio nacional, para establecer que las afirmaciones en su contra y de su familia son tendenciosas, falsas, por lo que advirtió que cualquier señalamiento que se haga sin respaldo en su contra y que transgreda el ordenamiento legal se reserva el derecho de acudir ante las instancias jurisdiccionales.
La campaña es orquestada con el último chisguete presupuestal, pero con la suerte de “El Coyote contra el Correcaminos”, fracasaron, provocando el enfado del embajador KEN SALAZAR por involucrar al gobierno de EU en una campaña de lodo.
Bueno, por hoy es todo.
Adiós y aguas con los patinazos…
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