EL PATINADERO

EL PATINADERO

El ex alcalde millonario

Por Juan Antonio Montoya Báez


Fue uno de los políticos universitarios que dejaron huella, fue Rector de la UAT por un periodo de ocho años.  Desde 1983 hasta 1992.

Es un personaje que sentó las bases de la política con la que se maneja la UAT, logró su reelección con el aval de todos los grupos del interior y el exterior.

Eran tiempos de la autonomía universitaria, donde los líderes luchaban por sus parcelas, por sus cotos de poder, todo era debidamente administrado y las relaciones con el gobernador eran respetuosas e institucionales, por así decirlo.

Los universitarios mandaban en sus centros educativos, claro se cayeron en los peores excesos, también se cometieron en su nombre muchos abusos y se amasaron grandes fortunas.

Una de las residencias más hermosas en aquellos años en ciudad Victoria, era precisamente la del ex Rector JOSÉ MANUEL ADAME MIER, quien no escatimó en gastos en su hogar.

La construcción se ubicaba por la calle 8, a un lado de la calle que da acceso al exclusivo club Campestre. En la acera de enfrente muy cerca se encuentra una plaza comercial exitosa, donde se ubica una agencia de autos.

Esta plaza comercial se asegura es propiedad del ex gerente de la Comapa, JOSÉ FLORENCIO BRINGAS MARTÍNEZ y el ex alcalde victorense, MIGUEL ÁNGEL GONZÁLEZ SALUM.

El ex Rector JOSE MANUEL ADAME MIER falleció en el 2017 y hace algunas semanas empezaron a derrumbar la que fue su residencia.

La pusieron a la venta y acerca del nuevo propietario se corren diversos rumores sobre el destino que tendrá el terreno, pero la más socorrida es de que habrá una nueva plaza comercial en una de las zonas más caras.

Imaginemos cuanto se pagó por una residencia que después se derrumbó por conveniencia de su nuevo propietario.

Entre las versiones que se corren es que el dueño es un ex alcalde de ciudad Victoria y otros aseguran que es de uno de los ex operadores de la campaña azul por la gubernatura.

Se asegura que se quedaron con millones de pesos que cobraron por el manejo de la campaña, por lo que decidieron poner a producir los recursos, de ahí que hicieron la operación de compraventa de la casa.

Es muy cierto que cada que hay campañas aparecen camarillas de cabuleadores profesionales, que venden estrategias, asesorías, gestorías y todo aquello que la palabrería y rollo barato pueda sorprender a los incautos que deciden comprar sus servicios de alto nivel.

Pero dan gato por liebre, son vendedores de espejos que, con su habilidad patrañera de merolico de plaza, ofrecen el remedio que lo cura todo, pero no sirve para nada.

Por lo pronto ya hay quienes les abren espacios preponderantes para que se sirvan con la cuchara grande y dejen más ralo el caldo.

Estos profesionales del engaño dan saltos cuánticos gracias a la novatez de quienes compran sus discursos de copia y pega. Aunque tarde o temprano por su ambición desmedida se les hace bolas el engrudo.

En política es común incorporar a esta clase chatarra a lugares donde sería importante cuidar trayectorias y desempeño.

Esas decisiones decepcionan las expectativas. Confirmando que la basura de unos es el tesoro de otros, que la compran demasiado cara.

Por lo pronto uno de esos aventureros que saqueo durante la pasada campaña a través de un prestanombres acaba de iniciar su proyecto de instalación de su plaza comercial. Sin miedo al éxito.

El saqueo estuvo grueso y en el interior de las campañas se convierte la palabrería en oro. Usted ya puede empezar a identificar a los millonarios propietarios.

Bueno, por hoy es todo.

Adiós y aguas con los patinazos…

Contacto:

[email protected]