EL PATINADERO
El gran batazo
Por Juan Antonio Montoya Báez
Casi el día de las madres, CARLOS PEÑA ORTÍZ decidió bajarse de su pedestal y en un acto de humildad decidió unirse a la campaña de AMÉRICO VILLARREAL ANAYA.
El nueve de mayo en Matamoros, hizo su presentación pública como uno de los nuevos grupos que impulsaban la campaña de AMÉRICO.
Previo al sí, se dio una estira y afloja entre AMÉRICO y MAKI, la ex alcaldesa de Reynosa quien se siente dueña y señora de una estructura política que oferta al mejor postor, pero sabía que perdía su triste esperanza de ganar más de lo que deseaba.
MAKI ya había conversado con los panistas, le llegaron al precio, pero la reynosense mandó hacer sus evaluaciones, leyó las cartas y supo que no tenía ninguna salida más que apoyar al entonces candidato de AMÉRICO.
En todas las evaluaciones el resultado era el mismo, AMÉRICO ganaría con o sin su ayuda. En Reynosa, se dio cuenta del apoyo que tenía Morena, sabía que no la necesitaban demasiado.
Es por eso que decidió irse a la campaña de AMÉRICO, por lo que giró la instrucción a su hijo CARLOS para unirse a MORENA.
En Matamoros, el alcalde de esta ciudad MARIO “La Borrega” LÓPEZ dispuso todo para darles el recibimiento y como gran anfitrión, fue testigo de un evento que significó un fuerte impacto mediático, pero también bajo los ánimos de los panistas.
El clan de los PEÑA solamente se unió a Morena dejándose llevar por sus ambiciones, pero no por convicciones, como lo hicieron otros grupos. Sabían que AMÉRICO ganaría y nadie puede enfrentar a un gobernador tan fuerte.
En ciudad Victoria, una decisión que se tomaba en San Luis Potosí impactaba en Tamaulipas, desde allá habían comprado la franquicia estatal del Partido Verde Ecologista de México. Era un proyecto ambicioso, pensando que esa aventura sería financiada por el gobernador potosino, RICARDO “El pollo” GALLARDO.
“El Pollo” GALLARDO no es ningún tonto, por algo es gobernador, mandó realizar una auditoría y detectó malos manejos, pidieron millones y millones que nunca llegaron a la campaña, por lo que despidió a los tamaulipecos.
Con todo y eso, de todos modos les alcanzó el dinero para comprar al PVEM, donde iniciaron un nueva aventura, se irían con todo para impulsar las aspiraciones del tampiqueño RODOLFO GONZÁLEZ VALDERRAMA, el entonces coordinador de los delegados en Tamaulipas.
La punta de lanza del proyecto era MANUEL MUÑOZ CANO, junto a RICARDO GAMUNDI y otros que apostaron ciegamente por el proyecto de RODOLFO GONZÁLEZ VALDERRAMA. Perdieron la apuesta.
Son tiempos de susurros, son los momentos que muchos alzan la mano, entregan sus cuentas, dan sus reportes, hablan de lo que les conviene, destrozan a otros cuando pueden. Es parte de la naturaleza humana. Es hoy cuando creen merecerlo todo, renovando sueños y ambiciones.
Por cierto, en Matamoros, el alcalde MARIO LÓPEZ dio el gran batazo, con acciones en beneficio del deporte. A principios de semana anuncio la compra definitiva de los terrenos donde se encuentran los campos de la Liga pequeña de Beisbol.
Pasaron 60 años para que estos terrenos formen parte del patrimonio del Pueblo de Matamoros y ahora los pequeños beisbolistas tendrán la seguridad de que disfrutarán de un espacio para practicar el llamado rey de los deportes.
En estos momentos se desarrolla la serie nacional de Liga Pequeña en la que participan varios estados. Ayer, Matamoros ganó la semifinal y se preparaban para ir por su pase a la Serie Mundial Williamsport en Pennsylvania. Esperamos que se coronen campeones.
Bueno, por hoy es todo.
Adiós y aguas con los patinazos…
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