AGENDA PÚBLICA
Diputada cursi y ruin
Por Salvador Leal Luna
Increíble, pero cierto. La legisladora de Reynosa, la tal, Magaly Deandar Robinsón del grupo parlamentario de Morena, sin duda, se ganó los calificativos de Cursi y Ruin, por su comportamiento en el interior del recinto legislativo. Urge que las autoridades del Comité Estatal, o en su caso, del Comité Ejecutivo Nacional, tome cartas en el asunto y separen del cargo a esta diputada que más bien, es una pandillera de cuarta; es decir ha sido desde su llegada una vergüenza legislativa.
Lo realizado por esta, no lo puedo decir diputada, porque ofendo a las demás mujeres que existen en el Congreso, pero necesario que tomen las cartas necesarias y una de ellas, para mí pese a ese maldito fuero, es separarla del curul que ostenta, porque no representa a nadie, menos a los tamaulipecos.
Deben de llamar a su suplente, porque los actos vandálicos que ha realizado en el interior del recinto, es como si estuviera en una cantina de cuarta, porque el arrebatar esta vez un ánfora donde se ponen los votos que los diputados hacen por cédula, es una agresión, además, golpea a la diputada local, Leticia Vargas, porque el ánfora al romperse le pego en la cara a su compañera y todavía con cinismo desmedido grita, está actuando, luego de que diputada Leticia cayó al piso.
Estos actos y otros que ha realizado está sujeta de marras, no deben de pasar por alto, porque este hecho debe ser sancionado con todo, actuar así, nada más porque es representante popular, es una burla para el pueblo de Tamaulipas, para el partido que la postulo, además de un mal ejemplo que está dejando a las demás generaciones, no de diputados, sino a la sociedad.
Por eso, de cursi y ruin, no se debe de bajar esta persona que desde que llego al Congreso de Tamaulipas, ha legislado con odio, con rencor hacía a los demás, pero nunca ha demostrado inteligencia para debatir con propuestas claras, solo gritos, insultos y majaderías a sus compañeros; es decir de Acción Nacional, del PRI, pero lo peor y grave del asunto es que hasta los trabajadores de ese poder legislativo, han llevado la soberbia de esta mujer que se cree la gallina de los huevos de oro.
El poder político o económico que pueda tener, esta diputada cursi y ruin, no le da pie para insultar y denigrar a los demás; repito a los trabajadores y gritar por los pasillos, palabras que sólo se escuchan en cantinas de mala muerte. Se desconoce qué tipo de educación tuvo, además si término una carrera, porque la ética profesional, se la paso por el arco de triunfo.
Veremos sí las autoridades del partido de Morena, aquí en Tamaulipas, por medio del delegado, Luis Ernesto Palacios Cordero, junto con el líder nacional, Mario Delgado, le ponen un estate quieta o de plano que sea remplazada por su suplente, porque los escándalos realizados por esta diputada cursi y ruin, son de una bajeza desmedida, lo que ha hecho en el interior del Congreso de Tamaulipas.
Esperemos, si hay medidas, sean severas y sin piedad, porque ni una amonestación pública o una sanción económica, si la hay, puede ser plausible, sino a mi juicio debe ser sacada de la bancada y que, entre la suplente, porque en el interior del poder legislativo anda de un lado para otro, siempre buscando camorra, además, no se calla, es una chachalaca legislativa.
Urgente que las autoridades de ese partido de Morena, no solo le llamen la atención, con esa actitud, porque mañana o pasado, si va agredir de manera más directa a una diputada o diputado, porque se convierte en una fiera sin bozal en el interior del recinto como si fuera de ella solamente, porque entra en ese transé y ya no respeta a nadie. Esto representa un peligro para Tamaulipas.
Por hoy es todo,
HASTA LA PRÓXIMA.
Correo Electrónico.
