Los Gallos Blancos de Querétaro abrirán este viernes la décima jornada del torneo Clausura 2022 del futbol mexicano al visitar al Necaxa, después de los hechos violentos el sábado pasado en su estadio, el Corregidora.
Tras la batalla multitudinaria entre hinchas del Querétaro y el Atlas la pasada jornada en el Corregidora, que dejó un saldo de 26 heridos, los Gallos vuelven a la acción en el certamen con sus jugadores preocupados porque han recibido amenazas de muerte, según el argentino Hernán Cristante, entrenador queretano.
Mis jugadores han recibido amenazas de muerte. No están tranquilos, hay esposas que están pensando en irse. No hicieron nada, ayudaron a la gente, le abrieron la puerta de los vestuarios, buscaron la forma de apoyar”, explicó.
A pesar de ello, la Liga decidió reanudar la competición después de suspender los últimos tres partidos de la jornada pasada y el Querétaro será el encargado de inaugurar la décima fecha en el estadio del Necaxa.
La pelea en Estadio Corregidora generó castigos para los Gallos, entre ellos que las barras visitantes no podrán ingresar a los partidos, que el Querétaro jugará un año a puerta cerrada sus duelos de local, un cambio de dueños y perder por 0-3 su encuentro con el Atlas.
Cristante deberá utilizar sus mayores dotes como líder del vestuario y hacer que sus futbolistas olviden las escenas de terror que se vivieron en el Corregidora, en donde personas con las playeras del Querétaro golpearon a seguidores del Atlas, alguno de los cuales terminaron en el piso sin ropa, inconscientes y con sangre.
No sería extraordinario que alguien no quiera seguir, el equipo está quebrado emocionalmente. Veo un plantel sensible, con temor”, añadió el técnico argentino.
En el cuadro de Cristante hay figuras sudamericanas como los ecuatorianos Fidel Martínez y Jefferson Montero, el argentino Ariel Nahuelpan y el guardameta uruguayo Washington Aguerre, uno de los héroes en la riña al quedarse varios minutos en la cancha de La Corregidora para intentar calmar a la barra queretana.