Matamoros, Tam.- En Tamaulipas es tiempo de sembrar una semilla de esperanza, que los tamaulipecos sepan que hay un proyecto diferente de gobierno en el que se necesita transitar con valores, con solidaridad, escuchando al pueblo, apoyando al pueblo y compartiendo con el pueblo sueños y esperanzas, aseguró Héctor Martín Garza González.
Al participar como orador principal tras la gentil invitación de la dirigente de la colonia ‘Barrio Praderas de las Riojas’, la señora María Antonia Ruiz Zapata, la tarde del domingo en Matamoros, Garza González hizo un llamado a fortalecer la esperanza y a respaldar las acciones de Gobierno del Presidente López Obrador para que los programas sociales sigan llegando a Tamaulipas de manera universal, total y absoluta.
“Hay un proyecto que lo tenemos que enraizar juntos. Veo un camino del todo nuevo. Es el camino que tenemos que transitar con valores, con solidaridad, escuchando al pueblo, porque como dice el presidente López Obrador con el pueblo todo, sin el pueblo nada”, indicó.
En su discurso Héctor Garza pidió a los presentes llevar el mensaje a todos los rincones de Matamoros y de Tamaulipas para seguir transformando a México.
“Esa es la gran convocatoria y ese es el gran mensaje que quería darles. Que nosotros como coordinadores de Guardianes de la Esperanza hagamos de nuestra tarea, una tarea que nos lleve a encontrar la felicidad, la armonía y la justicia en el pueblo y en el quehacer del pueblo, esa es la gran convocatoria”, mencionó, al tiempo que recordó a un conocido ídolo matamorense.
“Si es así bienvenidos, Matamoros va a cambiar y Matamoros va a volver a cantar lo que una vez Rigo Tovar tuvo como canción: “Mi Matamoros Querido”.
Ante el entusiasmo de los cientos de asistentes, que continuamente los interrumpían con porras y aplausos, el político reynosense también se dirigió de manera especial a las mujeres de Tamaulipas.
“No podemos bajo ningún argumento sentir que caminamos por el sendero de la justicia sino encontramos a las mujeres a nuestro lado, no queremos mujeres que vayan adelante porque nos pueden dejar, no queremos a la mujer tamaulipeca atrás porque la podemos olvidar, a las mujeres tamaulipecas las necesitamos a nuestro lado para transformar a México y a Tamaulipas”.
En su prolongado discurso recordó que a los 8 años de edad, cuando su familia vivía en ciudad Mante vendía periódicos y obtenía 5 centavos como recompensa por cada ejemplar vendido.
Con el paso de los años su trabajo en la función pública lo llevó a desempeñar cargos de primer nivel en el Gobierno Federal llegando a administrar como Oficial Mayor de una Secretaría un presupuesto de 17 mil millones de pesos.
“Por eso cuando escucho y veo a los niños, les quiero decir a sus mamás no pierdan la esperanza, de ahí vengo yo…y esa es la historia para decirles que no todo está perdido”.
Antes de finalizar Héctor Garza reconoció que desde los 17 años abrazó la pasión por la política, entendiendo siempre que la política es la acción para compartir sueños y esperanzas con sus hermanos de vida.
“Yo sí soy político, yo sí me dedico a la política, para mí la política es el quehacer supremo del ser humano para compartir con mis compañeros de vida sueños y esperanzas y entiendo que si nosotros somos solidarios con el que menos tiene, vamos a ser felices para poder llevarle al que menos tiene la esperanza de vivir en paz y en armonía y mucho mejor de como ahora vive”, sentenció.
