HUMO BLANCO

HUMO BLANCO

SE MARCA LA  DIFERENCIA

Por Clemente Castro González


La relación del Gobierno de AMÉRICO VILLARREAL ANAYA con las empresas de comunicación e información y con los periodistas es diferente a la que se tuvo en el sexenio pasado en donde  hubo autoritarismo, presión y hasta  persecuciones.
El actual titular de Comunicación Social del Gobierno de la entidad, FRANCISCO CUELLAR CARDONA y su familia, tuvieron que abandonar Tamaulipas durante la administración cabecista debido a que estaba de por medio su integridad física.
Y si bien las amenazas se atribuyeron a un grupo delincuencial, una versión distinta da cuenta de que la maniobra se implementó desde el  Gobierno de FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA.
Fueron varios casos de  amenazados pero, sin duda, lo que le hicieron a PACO CUELLAR, un periodista crítico de reconocida credibilidad,  llevó el “sello de la casa”.
Ello propició que  él y sus seres queridos tuvieron que hacer vida en más de una entidad  de la República para no exponerse a una situación que pudo ser fatal.
Lo que se hablaba en voz baja es que,  el Gobierno de filiación panista tenía su lista negra de críticos, libre pensadores y políticos opositores.
Ante esto, lo mejor que se podía hacer, si se estaba en la mira,  era poner tierra de por medio.
Cabe apuntar que uno de los entramados que pintan la represión y arbitrariedad  de Gobierno cabecista fue la detención de 6 personas, entre estos a los reporteros  LUIS VALTIERRA HERNÁNDEZ, JESÚS GONZÁLEZ ZÚÑIGA y GABRIEL GARZA FLORES (Q.E.P.D.),  a los que se acusó de ser coparticipes del asesinato  del periodista CARLOS DOMÍNGUEZ RODRÍGUEZ, ocurrido el 13 de enero del 2018, en Nuevo Laredo.
Los “chivos expiatorios”  permanecieron cerca de dos años en la cárcel hasta que fueron absueltos en octubre del 2019.
Al  que lamentablemente no se le hizo justicia fue a GARZA FLORES ya que fue encontrado  muerto de un infarto, el 14 de abril del 2019,  cuando estaba en prisión.
Cabe apuntar que el asesinato  de DOMÍNGUEZ RODRÍGUEZ se utilizó para tratar de incriminar al ex Alcalde de Nuevo Laredo, CARLOS ENRIQUE CANTUROSAS VILLARREAL por motivos políticos.
De hecho el munícipe vivía en el exilio, en los Estados Unidos, debido a que GARCÍA CABEZA DE VACA lo quería meter a prisión, mediante la fabricación de pruebas.
Entre los pendientes que dejó  el ex mandatario panista están el castigo a los culpables de los asesinatos de un par de periodistas.
Hablamos de HÉCTOR GONZÁLEZ ANTONIO, encontrado muerto el 29 de mayo del 2018, en una calle de la Colonia Estrella, en Ciudad Victoria y de ANTONIO DE LA CRUZ, también ultimado en   capital, a finales de junio del 2022.
Sobre el lamentable suceso ocurrido el año pasado, en el que igual  le quitaron la vida a una hija del reportero, el Diputado del Movimiento Ciudadano (MC), GUSTAVO CÁRDENAS GUTIÉRREZ, sugirió que a TONY lo habían asesinado debido a señalamientos  al Gobierno en turno.
Vale comentar que, el común denominador tanto en la persecución de periodistas como de los asesinatos fue la impunidad, lo que da cuenta de la falta de voluntad que tuvo la gestión panista para aplicar la ley y hacer justicia.
Ahora, en el actual mandato, se habla del cambio y del respeto irrestricto a los trabajadores de la información a los que, además, se les da su lugar y garantiza la libertad para desarrollar su labor.
Cierto que no puede hablarse de que durante el cabecismo se coartó la libertad de expresión, de forma abierta, pero algo que no esta a discusión es que se generó temor por acciones y omisiones.
El añadido es que quienes le manejaron Comunicación Social a CABEZA DE VACA se enfocaron a tener relación cercana con medios nacionales y crearon sus propios medios para difundir sus verdades.
Lo anterior se entiende debido a que se procuró proyectar la imagen del entonces mandatario, en el ámbito nacional,  porque el tipo se veía y todavía sueña con ser candidato en los  comicios del 2024.
Sí, pusieron en operación sus medios  y hasta una agencia de publicidad que, en esencia, les sirvió para concretar “negocios” millonarios.
Es factible que pronto  se ventile ese tema mismo que es un secreto a voces.
AL CIERRE
En las semanas por venir podría darse cambios en la Fiscalía General de Justicia en Tamaulipas, que dirige el abogado IRVING BARRIOS MOJICA.
Los movimientos se entienden debido a que  hay mucho por hacer en materia de procuración de justicia pero el  “elefante reumático”, de plano, esta postrado.
Ahí, en la Fiscalía, todavía hacen de las suyas algunos emisarios del pasado. Y si no hay disposición para realizar  bien las cosas, tendrá que cortarse por lo sano ya que la transformación no puede estar sujeta a intereses de grupos o particulares.
La pinza empieza a cerrarse y es tiempo de definiciones. Se agotó el periodo de gracia.
Ahora si que el que quiera oír que oiga.